Ley de potencia inversa
(de la vida de las estrellas) las estrellas viven mucho tiempo. Según los astrofísicos, el período de vida de una estrella es aproximadamente proporcional a la inversa del cuadrado de su masa (en términos más generales, una ley de potencia inversa). De ahí, que una estrella que tuviera una masa diez veces superior a la del Sol, viviría sólo una centésima parte de los diez mil millones de años que se calcula que vivirá éste, es decir, viviría sólo cien millones de años. Una estrella noventa veces mayor que el Sol, sólo podrá vivir un millón de años, que no es nada a la escala temporal cósmica. Esto puede explicar por qué no vemos apenas estrellas supermasivas de este tipo: desaparecen rápidamente. Si una estrella tuviera noventa veces la masa solar, ese peso aplastante calentaría su núcleo estelar hasta que alcanzara temperaturas elevadísimas y despediría las capas exteriores de la estrella, reduciendo su masa. Estas estrellas de gran tamaño no son estables, por lo que noventa veces la masa solar parece ser el máximo volumen posible, aunque recientemente se ha descubierto una estrella que superaría la masa del Sol en unas ciento cincuenta veces, lo que coloca en jaque la idea.
¿Y la masa mínima de las estrellas, la de las que son mucho, más pequeñas que el Sol? Todavía ello es una discusión abierta. No se tiene claro cuál es la masa mínima requerida para la formación de una estrella.