Enemigos públicos N°1. Molestan y pican en un aumento proporcional a nuestros deseos de que se vayan; son diminutos, por lo que atraparlos e incluso verlos, es una tarea aún más compleja que captar la Nebulosa de Caballo en una noche despejada. Uno de los mayores inconvenientes que presentan estas criaturas es que no se les puede engañar con un foco de luz para atraerlos y así matarlos mas fácilmente, debido a que el “Foco” es el enemigo numero 0. (véase
Foco)