Macroética

La Macroética es la ética ambiental, ecológica y planetaria. Tiene que ver con la asignación de recursos para la salud por los estados, política social del país y lo que se establece como prioridad social para el bienestar de la persona.

A nivel histórico el mundo se ha preguntado por las consecuencias que nacen a partir de la globalización, sobre todo las enfocadas al ámbito laboral y medioambiental. Fue necesario, que las personas empezaran a cuestionarse por los nuevos parámetros de la ética, sobre la tecnología y la ciencia y sobre aquellas cuestiones que pudieran afectar a la humanidad. Surge entonces, la Macroética, definida como “la ética de las relaciones interpersonales”, es decir, aquellas manifestaciones que surgen a partir de los nuevos vínculos que se establecen entre los hombres y estos con su ambiente. Generalmente, el concepto de macro y microética son aplicables al ámbito laboral, pero en este apartado lo definiremos como la conexión que nace entre el ser humano y su hábitat, entendiéndose como su medio ambiente, su entorno, la naturaleza que rodea al sujeto.

Principalmente, la Macroética atiende las problemáticas que surgen de la actividad como “humanidad” o “sociedades” frente a su ambiente, es decir, el hombre contemporáneo se ve enfrentado a diversas situaciones que afectan de forma grave a la naturaleza, por ejemplo, los gases emitidos a la atmósfera, la deforestación, la sobrepoblación, la extinción de las especies, entre otras que hacen que nuestro planeta se vea cada vez con menos recursos para subsistir en un futuro. El rol principal de la Macroética es fijar los parámetros que permitan explotar los recursos, pero en una forma medida que permitan que el hombre se desarrolle en completa armonía, que logre potenciarse sin ocasionar tantos efectos. Los temas que caben en esta disciplina son esencialmente el calentamiento global y la contaminación ambiental, la deforestación, etc., problemas elementales que aquejan al conjunto de la sociedad.

Asimismo, la Microética atiende los conflictos específicos de un ser humano concreto o de un grupo determinado en base a su actuar individual en su ambiente, cómo este(os) sujeto(s) participan e interactúan con su espacio; aquí entran situaciones como: el ahorro de energía en la vivienda, el consumo moderado del agua, la limpieza y el reciclaje, que son acciones personales que se realizan en pro de una causa común.