Empresa
Los caballeros andantes de la Edad Media tenían por costumbre pintar en sus escudos unas figuras, verdaderos designios, que se llamaban empresas. En cada caso era un símbolo enigmático para los demás, puesto que su significado solamente era conocido por el autor. Ayudaba a trazar el camino, orientar la marcha, y por sobre todo dar sentido a la existencia del caballero. Contemporáneamente, la palabra ha tomado otros significados, pero desde la perspectiva de la creatividad reparar en su raíz nos permite apuntar sobre un aspecto esencial de todo propósito con el cual se adquiere un compromiso fundamental. En la actualidad es habitual hablar de emprendedor o espíritu emprendedor.