Estrategia de Walt Disney
El célebre creador Walt Disney utilizaba una estrategia de pensamiento que le dio grandes resultados, consistente en desempeñar tres roles diferenciados durante su proceso creativo: el soñador, el realista y el crítico. En un primer momento actuaba como un soñador, dejando que su fantasía volara sin restricciones. Esta manera de proceder le permitía disponer de ideas distintas, asociaciones de palabras fuera de lo común, analogías absurdas, pero en conjunto un material lleno de promesas creativas. Más tarde trabajaba para convertir esas fantasías en proyectos realizables, aplicando una mirada pragmática y con sentido de realidad. Finalmente, asumía el papel de un crítico sin concesiones, llevando cada propuesta al límite de sus posibilidades. En cierto modo, esta estrategia coincide con la que utilizaba Leonardo da Vinci, quien pensaba que no podía comprenderse un objeto hasta que no mirarlo al menos desde tres perspectivas diferentes.