Agricultura tradicional autárquica
Se caracteriza porque el campesino produce lo que precisa para su alimentación, la de su familia o del grupo. Es, en sentido amplio, la que ha existido en el mundo hasta la llegada de la Revolución Industrial. Actualmente se practica en los países menos industrializados, países subdesarrollados o de economía agraria dominante, como actividad más fundamental, y persiste todavía en sectores o regiones menos desarrolladas, dentro de países industrializados o más desarrollados. La población activa agraria que trabaja en ella es la más numerosa, y los especialistas señalan que más de dos tercios de la población mundial dependen aún de este tipo de agricultura. La comercialización o intercambio de productos es prácticamente inexistente. Sin embargo, actualmente se incluyen en este tipo, por extensión, aquellas economías agrarias que dedican más de dos tercios de su suelo y del trabajo humano a una producción destinada, fundamentalmente, al autoconsumo. Utiliza una tecnología elemental y rudimentaria, tanto en cuanto a los aperos y herramientas como al empleo del regadío o respecto a los transportes. Su relación con el medio físico es de total dependencia. En algunos de los países y regiones en los que se practica pueden darse épocas de hambre debidas a fuertes sequías, a excesivas lluvias o al empobrecimiento del suelo.