fueros
En los reinos cristianos medievales, estatutos jurídicos privilegiados concedidos por los reyes a las ciudades y sus territorios para estimular su repoblación, permitiéndoles leyes e instituciones propias. En el siglo xix, la demanda de protección de los fueros es una de las bases del carlismo y en parte el origen de los nacionalismos. Los fueros son lo contrario al centralismo y la unidad de códigos constitucional, características de la política liberal. La dictadura franquista empleó el término «fuero» para algunas de sus Leyes Fundamentales.