Albigenses
Los herejes cataros del sur de Francia tomaron su nombre de Albi, el mas antiguo de sus "obispados" (fundado en 1167). Los esfuerzos eclesiásticos para convertirlos acabaron provocando el asesinato del legado papal, Pierre de castelnau, en 1208, lo que condujo a la predicación de una cruzada contra ellos. Las guerras terminaron en 1229, pero la victoria católica fue incompleta. Se estableció entonces la Inquisición, encargada de dar caza a los herejes, pero todavía se tardaría un siglo en eliminar totalmente la herejía.