Cornucopia
La cornucopia o cuerno de la abundancia es uno de los cuernos del dios-río Aqueloo, metamorfoseado en toro, que le fue arrancado por Hércules, cuando luchaba contra él. Según otros, es un cuerno de la cabra con cuya leche la ninfa Amaltea amamantó a Júpiter en su niñez, cuando se ocultó de su padre, Saturno, para que no lo devorase.
Se dice que Júpiter se lo arrancó a la cabra jugando, y se lo regaló a Amaltea, asegurándole que el cuerno se llenaría de frutos cada vez que ella lo deseara.
La cornucopia es un atributo muy mostrado en la monedas romanas, en manos de divinidades benéficas, como Ceres y Cibeles, o de alegorías como Abundancia y Fortuna.