Usos directos
Son las aplicaciones en las cuales el fluido geotérmico es utilizado como fuente de energía térmica (intercambio de calor). Las usos directos más difundidos son invernaderos, sistemas de calefacción, refrigeración, acuicultura, secado (de madera, industrial), deshidratación de vegetales, bombas de calor, recreación, terapias físicas (termalismo), entre otros.