Glosario Parafilias / Término
(Ochlofilia) excitación ante una multitud de personas reunidas.
Don José Ortega y Gasset comienza su quizá más famosa obra, La rebelión de las masas (1929), con un capítulo que titula “El hecho de las aglomeraciones” y allí escribe: “Hay un hecho que, para bien o para mal, es el más importante en la vida pública europea de la hora presente. Este hecho es el advenimiento de las masas al pleno poderío social.” Un poco más adelante continúa: “La muchedumbre, de pronto, se ha hecho visible, se ha instalado en los lugares preferentes de la sociedad. […] Ya no hay protagonistas; sólo hay coro.” ¿Está Ortega hablando de hace casi cien años o nos lo está diciendo a nosotros que lo releemos ahora? Ése es, quizá, uno de los privilegios de la genialidad: que sus juicios traspasan el tiempo en el que son emitidos para mantener o incluso acrecentar su vigencia. En efecto, si miramos a nuestro alrededor en casi cualquier ámbito de la sociedad, lo primero que nos asalta es la visión de que en todas partes y para todo hay multitudes: los espectáculos, los espacios considerados, y hasta publicitados como culturales, desde una exposición en la ciudad a una ruta románica; por supuesto, los ya denominados “espectáculos de masas” con los deportes en primerísimo lugar; los parques, jardines, las mismas calles.
Frente a esta situación las personas nos dividimos en dos actitudes. Una es la de quienes disfrutan formando parte de la masa popular, afectos de oclofilia, a los que ya se refería con dolor y resignación el mismo Ortega diciendo que son aquellos que “aun sabiendo que son masa, están satisfechos de serlo”. Otra, la de quienes padecen de oclofobia, de reparo ante esas aglomeraciones no sólo físicas sino también de forma de pensar. Ambos grupos se miran entre sí con desdén y hasta con cierta aversión pues se saben miembros de “clases mentales” muy diferentes y en muchos sentidos claramente antagónicas. No cabe duda de que la corriente triunfante es, como ya lo era hace un siglo, la primera. A la segunda sólo le cabe el recurso de esperar a que decaiga lo que se haya convertido en moda pasajera y la multitud cambie de objetivo, para disfrutar de nuevo a su aire de lo que sea que volverá a ser placer de minorías. ¿Recordamos hace unos años las súbitas pasiones multitudinarias y efímeras suscitadas por cosas tan singulares como el canto gregoriano o la ópera?
(Fuente: José Ignacio de Arana, 17/08/2018, Laboratorio del lenguaje)
Enlace permanente: Oclofilia - Fecha de actualización: 2019-01-03 - Fecha de creación: 2015-07-08