Moldeo por inyección, tornillo
A diferencia del tornillo de extrusión que gira a velocidad constante al ser la extrusión un proceso cintinuo; el de inyección gira, transportando, plastificando y depositando el material en su parte delantera, obligando al tornillo a retroceder, mientras sigue girando y aportando más material. Una vez se ha conseguido la dosificación de material establecida, el tornillo se detiene, hasta que, llegado el momento de la inyección se desplaza hacia delante, actuando como un émbolo, y obligando al material a entrar en el molde. Cuando el material fundido es comprimido dentro del molde, la acción de empuje del tornillo puede causar un retroceso del material al deslizarse por los laterales del tornillo. Para evitar el retroceso del material, una vez se ha llenado la cavidad del molde, el tornillo debe disponer de una punta o dispositivo que actúe como una válvula antiretorno o de retención. Los tipos de válvula de retención mayoritariamente utilizadas son: a) Válvulas de anillo o aro. b) Válvulas de bola, siendo las válvulas de anillo, por su sencillez de mecanismo y prestaciones las más utilizadas.