Glosario Psicología / Término
"O profecía que genera su cumplimiento. Falsa definición de una situación, que provoca en los individuos conductas que tienden a que esa situación se materialice".
Vander Zanden James, Manual de Psicología Social, Barcelona, Paidós, 1986, pág. 624.
Una profecía que se autocumple es una suposición o predicción que, por la sola razón de haberse hecho, convierte en realidad el suceso supuesto, esperado o profetizado, confirmando de esa manera su propia "exactitud". Ejemplo: si alguien supone que lo desprecian, se comportará para que lo desprecien.
Tradicionalmente teníamos la causalidad lineal (A causa B), pero estas profecías que se autocumplen nos dicen que en realidad B también causa A, o sea, un hecho todavía no producido (futuro) determinó efectos en el presente, efectos que a su vez hicieron que cobrara realidad el hecho pronosticado. Aquí el futuro —y no el pasado- determinó el presente. Ejemplo: me despreciarán (supuesto suceso futuro), por lo tanto, ahora me porto como si me despreciaran (presente).
Yo puedo predecir que me resfriaré porque ahora estoy estornudando, pero esto no es profecía autocumplidora porque tomaré las medidas para no resfriarme. A partir de esto que sostiene Watzlawick, podemos pensar que profecía autocumplidora sería en este caso desabrigarse, etc. En el primer caso, puedo comprobar después si resfriarme es verdadero o falso, pero en el segundo estoy de entrada creando las condiciones (inventando una realidad nueva) para que ello ocurra.
Esta inversión de causa y efecto se ve en los conflictos interpersonales, y más concretamente en la llamada puntuación de la secuencia de hechos: el marido se retrae porque la mujer lo regaña, y la mujer lo regaña porque este se retrae (A influye sobre B y B sobre A). O sea lo que para la mujer es causa (el retraimiento es causa que ella lo regañe), para el marido en cambio es el efecto (su retraimiento es un efecto de que ella lo regañe). Ambos crean dos realidades contradictorias y engendran dos profecías que se autocumplen: los dos modos de conducta que subjetivamente se consideran como reacción a la conducta del otro, provocan precisamente esta conducta en el otro y justifican "por eso" la conducta propia.
Estas profecías pueden usarse a veces en forma deliberada, lo que puede ser peligroso.
La experiencias cotidiana nos enseña que sólo muy pocas profecías se autocumplen: sólo se autocumplen cuando se cree en ellas, cuando hay convicción de que el suceso ocurrirá.
Otro ejemplo: en una escuela, al fin del curso algunos alumnos demostraron mayor inteligencia que otros según los tests, precisamente aquellos alumnos que a principio de año, tomados al azar, se les dijo a los maestros que "tenían aptitudes extraordinarias". Nuestros pensamientos y esperanzas engendran ellos mismos esas realidades. Lo mismo pasa cuando creemos que tal persona es enferma y la hemos etiquetado de loca: aunque no lo sea terminará comportándose como tal. También se vio que la tasa de mortalidad es más elevada en aquellos pacientes con cáncer que se preparaban para morir con espíritu sereno y maduro. Profecías autocumplidoras vemos también en los ejercicios de imaginación positiva del tipo "quiero curarme" o "me siento mejor".
Hay también autocumplimientos negativos: un prisionero tuvo un sueño donde le decían que el 30 de marzo lo liberarían. En la realidad, al llegar ese día esto no se cumplió, con lo que murió de tristeza. De alguna forma se había liberado: el autocumplimiento negativo es una profecía que se cumple…. no cumpliéndose.
Watzlawick, en suma, sostiene un constructivismo según el cual cada uno de nosotros construye una realidad, y si tomamos conciencia que tal realidad es construída, inventada, seremos más tolerantes con nosotros y los demás que también inventan sus realidades. El constructivismo viene a mostrar que objeto y sujeto no son cosas separadas.
Watzlawick Paul, Profecías que se autocumplen.
Enlace permanente: Profecia autocumplidora - Fecha de creación: 2018-03-27