Glosario Teosofía / Término
Mr. Martillet ha probado en su libro El signo de la Cruz antes del Cristianismo (París, 1866) que esta señal era usada como emblema religioso en una porción de pueblos europeos, asiáticos y africanos antes del cristianismo. El séptimo rey del noveno ki en China, leemos en la obra de Pauthier, se llamó Hien Yuen por haber hecho la balanza “poniendo juntos los dos trozos de madero, el uno derecho y el otro al través, a fin de honrar al Altísimo”. “El símbolo, dice Cantú en su Historia Universal, fue siempre la cruz; ésta se halla muy frecuentemente en Egipto como signo hierático de la vida; como signo de salvación, fue trazada en la frente de los arrepentidos de Jerusalén (Ezequiel, IX); en Palenque, ciudad mejicana tan antigua que ni siquiera los primeros conquistadores tuvieron conocimiento de ella, se la encontró colocada en el santuario como objeto de culto”. (Historia universal, tomo VII, pág. 707). En su erudita obra Los Nombres de los Dioses, págs. 317 y siguientes, dice E. Sanchez Calvo: “Hay noticia, en el mundo antiguo, de la cruz que señalaban en el aire los sacerdotes etruscos, apuntando con sus bastones a los cuatro puntos cardinales del espacio, residencia del espíritu, habitación de los vientos. Esta cruz circunscripta por el círculo representaba el universo, pero incluída en él, representaba el conjunto de las cosas, el infinito, el espacio, el soplo, el espíritu de vida, todo. Es la cruz, por lo visto, el símbolo más antiguo de la vida, originada en el soplo universal, e individualizada en la respiración de los seres… La cruz fue, pues, símbolo del espíritu o del soplo, y figura de sus cuatro puntos cardinales, y como tal, emblema de la vida y de la muerte… Hasta una tribu de gaspesianos en el Canadá adoraba la cruz y designaba la dirección de los vientos, a la llegada de los europeos”. –Mucho antes de que la cruz o su signo fuese adoptado como símbolo del cristianismo, dicho signo era usado como señal de reconocimiento entre los adeptos y neófitos, siendo éstos últimos denominados Chrests –de Chrestos, el hombre de la tribulación y del dolor. Dice Eliphas Lévi: el signo de la cruz adoptado por los cristianos no les pertenece exclusivamente. Es también cabalístico, y representa las oposiciones y el equilibrio cuaternario de los elementos. Vemos por el versículo oculto del Paternoster … que había primitivamente dos maneras de hacerlo, o cuando menos dos fórmulas muy diferentes para expresar su significado: una reservada a los sacerdotes e iniciados; la otra para los neófitos y los profanos. Así, por ejemplo, el iniciado, llevando la mano a la frente, decía: A ti, y luego añadía: pertenecen, y continuaba, llevando la mano al pecho: el reino ; después al hombro izquierdo: la justicia ; al hombro derecho: y la misericordia. Juntaba luego las manos, añadiendo: por los ciclos generadores. Tibi sunt Malchut et Geburah et Chesed per œnas. –Signo de la cruz absoluta y magníficamente cabalístico, que las profanaciones del gnosticismo lo han hecho perder por completo, a la Iglesia militante y oficial. (Dogme et Rituel de la Haute Magie, II, 88). –La “Iglesia militante y oficial” hizo más: habiéndose apropiado de lo que jamás le perteneció tomó únicamente lo que el “Profano” tenía: el significado cabalístico de los Sephiroth masculino y femenino. Nunca perdió el significado interno y superior, puesto que jamás lo poseyó, a pesar de las tercerías de Eliphas Lévi en favor de Roma. El signo de la cruz adoptado por la iglesia latina era fálico desde el principio, mientras que la de los griegos era la de los Neófitos, los Chrestoi. (Doctr. Secr., II, 593). –Véase: Cruz, Cruz del Calvario, etc.
Enlace permanente: Signo de la Cruz - Fecha de creación: 2012-09-09