Banco de San Carlos

Primer banco oficial de España. La idea de constituir un banco oficial se remonta al siglo XVI y se intensifica en el siglo XVII con el advenimiento de la dinastía de los Borbones: proyectos de Alberoni y Riperdá durante el reinado de Felipe V; del Marqués de la Enseda, con Fernando VI y de Campomanes a comienzos del reinado de Carlos III.

Floridablanca, en 1778, impulsó estos trabajos, ya que deseaba obtener recursos con los que financiar la guerra cuya proximidad se preveía, y que efectivamente se declaró 1779 contra Inglaterra. El proyecto que finalmente se adoptó fue el de Cabarrús, creándose el Banco de San Carlos en 1782, con la función principal de sostener los vales reales depreciados por sus masivas emisiones. Hasta 1785 éste operó con la aquiescencia internacional y de los potentados españoles, pero su intervención en operaciones aventuradas, el aumento de la inflación provocada por las continuas guerras, la suspensión de los arribos de plata y la paralización del comercio dieron lugar a partir de 1796 que entrara en una profunda crisis que obligaron a solicitar la intervención del Estado. Desapareció en 1829, al transformarse en el Banco Español de San Fernando.