Reformas hacendísticas de Felipe V

Al finalizar la Guerra de Sucesión español, Felipe V inició una tímida homologación tributaria del Reino de Aragón a la Corona de Castilla estableciendo nuevas contribuciones de cupo en los reinos aragoneses. Los cupos eran proporcionales al número de vecinos y los diferentes reinos gozaron de autonomía para organizar la recaudación.

Estos tributos fueron denominados de diferentes maneras: catastro en Cataluña, equivalentes en Valencia, talla en Baleares y única contribución en Aragón.