Amplitud articular

Es la capacidad de movimiento que tienen las articulaciones para flexionar y extender el cuerpo o una parte de éste, sin sufrir daños óseo-musculares y tendinosos.

El esqueleto de los vertebrados está constituido por piezas óseas resistentes, que se unen articuladas entre sí. Esta unión de dos o más huesos se denomina articulación. La articulación es el punto de apoyo sobre el que se mueven los huesos bajo la acción de los músculos. La función articular está íntimamente relacionada con la orientación y formas de las superficies articulares así como la solidez y disposición de los ligamentos correspondientes, según expresa la ley general biológica del movimiento.

La flexibilidad articular se ha asociado siempre a ciertas disciplinas deportivas como la gimnasia artística y la rítmica. Desde esta perspectiva los ejercicios de estiramiento están claramente delimitados y en muchos manuales se considera el estiramiento estático como el mejor y único método valido para estirar. Este pensamiento limita la flexibilidad a unos cuantos ejercicios sin pensar que en realidad cualquier ejercicio o movimiento deportivo requiere una determinada amplitud de movimiento (ADM), enmarcada dentro de las posibilidades de movilización en función de las propiedades de los tejidos y las bases neurofisiológicas.

Evidentemente la ADM condicionará parámetros esencialesen la mayoría de acciones finales de cualquier deporte como la aceleración. Vamos a poner un ejemplo: un jugador de fútbol que llega muy forzado a un balón y no puede realizar un movimiento con la suficiente amplitud, disminuirá mucho la aceleración del pie y por tanto la potencia de golpeo.

Muy a menudo, la justificación de los ejercicios de estiramiento es por una supuesta reducción del riesgo de lesión. Esta simplificación tan drástica es probable que no conduzca a nada. De hecho cuando estiramos lo hacemos sobre las mismas estructuras o tejidos que soportan las otras cargas de entrenamiento (trabajo de fuerza) y la adaptación de estas será única.

Por eso los beneficios o perjuicios de un tipo de estiramiento afectarán a todo el sistema y, por tanto, a las posibilidades de movimiento del deportista.

En los deportes colectivos aunque las acciones se repiten una y otra vez, todas ellas presentan características diferentes, lo que significa que los recorridos articulares serán distintos en cantidad y calidad de movimiento. Esta característica, determinada por el entorno inestable, es la que más diferencia a los deportes individuales de los colectivos, y sin ninguna duda debe justificar la utilización de los métodos de estiramientos propios.

Flexibilidad, elasticidad y amplitud de movimiento

La flexibilidad se considera una cualidad física compleja influenciada por multitud de factores, pero hay que diferenciarla de amplitud de movimiento.

Por ejemplo muchos jugadores tienen una excelente amplitud de movimiento pero nunca estiran, y otros estiran a menudo pero continúan teniendo una limitada ADM.

La amplitud de movimiento o movilidad articular es una valoración cuantitativa del arco de movimiento articular de una determinada articulación al realizar un movimiento cualquiera, tradicionalmente con independencia de la velocidad de ejecución.

Actualmente cuando examinamos un movimiento, las dos primeras cosas que podemos observar son la amplitud de movimiento y la velocidad de ejecución que determinan en parte la calidad del movimiento. La integración de los dos parámetros (cantidad y calidad) nos permite aproximarnos a las dos posibles manifestaciones de la ADM como son la flexibilidad y la elasticidad.

Por tanto, amplitud de movimiento puede considerarse simplemente una valoración cuantitativa de la movilidad articular. Si esta se relaciona con la velocidad de ejecución o aceleración de las palancas implicadas en el movimiento podemos evaluar una articulación en función de su capacidad de deformación (flexibilidad) o por su capacidad de recuperar la longitud no forzada cuando cesan las fuerzas que lo mantenían deformado (elasticidad).