Alternativa a la opción de empleo protegido, este modelo integra a las personas con discapacidades en el trabajo ordinario a través de una serie de apoyos temporales o permanentes.
Este modelo de integración laboral fue pensado para que, las personas con discapacidad, pudieran acceder a las empresas ordinarias en condiciones de empleo, trabajo y sueldo lo más similares posible a las de otro trabajador sin discapacidad en un puesto equiparable dentro de la misma empresa.
Con esta modalidad se hace realidad plena el principio de igualdad de oportunidades pues la persona con discapacidad es un trabajador más de la plantilla.