Escarpe de falla primitivo u original
Este tipo de escarpes procede directamente de la dislocación producida por los movimientos tectónicos, por lo que se le denomina también escarpe tectónico. Sus características esenciales son dos: en primer lugar, el valor de la desnivelación topográfica y el salto de falla son idénticos, en segundo, la superficie topográfica del escarpe coincide con la parte del plano de falla situada encima de la línea de falla (zona levantada) Para que se conserve un escarpe de falla primitivo es necesario que el labio levantado esté constituido por materiales resistentes a la tectónica o materiales duros, que la falla sea reciente o que la erosión haya actuado muy poco todavía; si las tres condiciones coexisten posee una gran nitidez; si no se cumplen, el escarpe retrocede situándose tras el plano de falla y con un trazado más o menos sinuoso. Además, el salto de falla se reduce, bien sea por erosión del labio levantado, por acumulación en el labio hundido o por ambas causas.