Hispania
nombre por el que los romanos conocieron a la península Ibérica, es decir a los actuales territorios de España y Portugal. Llamada por los griegos y cartagineses Iberia en alusión al río Iber (actual Ebro), Roma prefirió una palabra -derivada de una voz cartaginesa- alusiva a una característica zoológica de estas tierras en la antigüedad: ser una 'tierra de conejos', que es lo que etimológicamente significa.